Temor a las sanciones estadounidenses: la Corte Penal Internacional expulsa a Microsoft de su administración

La Corte Penal Internacional (CPI) se está alejando del software de Microsoft, eligiendo alternativas de código abierto como openDesk, desarrollado por el Centro para la Soberanía Digital. Esta decisión resalta el creciente enfoque de Europa en la soberanía digital y la reducción de la dependencia de los gigantes tecnológicos estadounidenses. Este cambio es particularmente notable dada la posición única de la CPI en el derecho internacional y las posibles implicaciones para la seguridad e independencia de los datos. La medida de la CPI se deriva de la preocupación por la dependencia de Microsoft, particularmente después de un incidente en el que el fiscal jefe de la CPI, Karim Khan, no pudo acceder a su correo electrónico. OpenDesk, la alternativa elegida, es un software de oficina de código abierto. La decisión también se produce después de que Estados Unidos impusiera sanciones a Khan. El impacto se extiende más allá de la CPI, ya que la medida subraya una tendencia más amplia de las entidades europeas que buscan reducir la dependencia de las empresas tecnológicas estadounidenses. Esto se evidencia aún más con iniciativas como el "Consorcio Europeo de Infraestructuras Digitales de Dominio Público" (EDIC) de la UE. Este consorcio tiene como objetivo fomentar el desarrollo y la adopción de soluciones informáticas europeas y estándares abiertos. Esta decisión refleja un impulso más amplio hacia la autonomía digital en toda Europa, con varios países que ya colaboran en iniciativas para promover una infraestructura digital independiente. El enfoque en las soluciones de código abierto y las alternativas europeas sugiere un movimiento estratégico hacia un mayor control sobre los activos digitales y una menor vulnerabilidad a las presiones externas.